jueves, 2 de abril de 2015

IZAH - Sistere (Nordvis, 2015)


RESEÑA A FONDO

ASÍ SE DEBUTA

Hace ya varias semanas, navegando la red en busca de nuevos lanzamientos de este 2015, topé con un artwork que me llamó la atención y que me instó a izar las velas y dejar que el viento internetil me llevara en dirección al paisaje forestal que dibuja su portada, territorio totalmente desconocido para mí en ese momento. Mi barco se detuvo en la costa holandesa, desde donde empecé el descubrimiento de estos oriundos de Tilburg llamados Izah.
 
Sistere supone el álbum debut para la banda, tras dos EP’s. Su larga duración (72’), repartida en apenas cuatro cortes, y el amplio espectro de sonidos que contiene, podrían suponer una propuesta muy arriesgada para esta joven banda, más si cabe al tratarse de su ópera prima. Sin embargo, no solo salen airosos de su apuesta, sino que consiguen un triunfo por todo lo alto, que les coloca desde ya mismo en el panorama sludge / postmetalero continental. Porque sí, supongo que el estilo que mejor les encaja es el sludge atmosférico o el post metal, pero como ya he comentado, su música abarca muchos otros. Es profunda, compleja y rica en matices. Veámoslo tema a tema.

1. Indefinite Instinct: a diferencia del título. El corte se abre con sonidos drone y atmosféricos, entre los que se insertan inquietantes cacofonías y que nos adentran en el bosque de Izah como si de un sueño opresivo se tratara. Pausada, entra la banda en acción, con un tempo lento, sin estridencias. La voz emana de las profundidades transmitiendo angustia y desgarro. Poco después, se inicia el vendaval postmetalero: riffs potentes, sonido compacto, atmosferas cuidadas y una voz que, al final de cada frase, me recuerda a Aaron Turner.
Tras el primer despliegue de contundencia y credenciales, un desvío nos conduce por un pasaje marcadamente post rock, que se inicia con sintetizadores y un tranquilo arpegio de guitarra, crece con la incorporación de capas, tremolo picking y un discurso, y prepara su desenlace con la llegada de la base rítmica, desenlace que nunca llega a estallar, sino que decelera para regresar a territorio metalero, con claras influencias de Rosetta. El final nos devuelve a la angustia del inicio cerrando el círculo de Indefinite Instinct, con un riff repetitivo y muy pesado, marcadamente sludge, y unas voces que encajan a la perfección con el título escogido.
2. Duality: demoledor inicio el de este tema, en el que la banda presenta una versión más acelerada y agresiva, con momentos fronterizos con un death metal de tiempos medios y con toques progresivos, que muchos otros bloggers coinciden en enlazar con The Ocean. Tras dos minutos de pura intensidad y de progresión de post a sludge, la caña se suaviza para dar paso a un melódico y efectivo riff de guitarra, donde siento la presencia de Cult of Luna. El ritmo es elevado, las secciones de la canción no se dilatan demasiado en el tiempo. Estos holandeses no están dispuestos a hacer demasiadas concesiones y pronto vuelven a la carga con ritmos rápidos y potentes, para volver a romperlos con riffs sludge y adentrarnos en una transición, nuevamente con discursos, que desemboca en un pasaje más calmado. Duality. El título que encaja de nuevo.
Dejando atrás la estela de Isis, la progresión central del tema se desarrolla muy a lo Amenra o Fall of Efrafa, pero con una personalidad apabullante. En ningún momento permiten al oyente adherirse a las comparaciones; se reconocen las influencias en muchos tramos, pero rápido salen de ellas, dejando claro que hay calidad en el proceso creativo, algo que demuestran en el tramo final, con un buen uso de riffs algo más melódicos que dotan de variedad al conjunto, y ofrecen momentos más épicos y emotivos al oyente.


3. Finite Horizon: brillante tema que se inicia con una incesante sucesión de alternancias de fraseos, estilos y tempos. Tras un "decreciente" riff sludgy inicial, y un breve pasaje doom, que deriva en voces limpias que serán recurrentes en el tema, se alcanza una sección de guitarras cortantes, riffs aceleradísimos, con dobles bombos a todo trapo e incluso blast beats, más propios de un grupo de death técnico/progresivo o math metal, que suponen el cénit de ejecución instrumental del álbum. El momento central del tema me vuelve a transportar a los Isis más atmosféricos, con las voces limpias antes mencionadas, que me recuerdan mucho a alguien y (¡demonios!) no-sé-a-quién, alternándose con las desgarradas y agónicas. El clímax generado ya se mantendrá hasta el final del corte, regalándonos el fragmento de mayor emoción del disco.

4. Sistere: no satisfechos con la demostración realizada en los tres temas previos, que oscilan entre los 11 y casi 16 minutos de duración, Izah cierra el disco con este mastodonte de 31.  Y menudo mastodonte, pura calidad. Tras un inicio de post metal atmosférico de altos vuelos, nos atraviesa el pecho de lado a lado, en una fracción de segundo, la irrupción de un black metal atmosférico que nos mantiene con el diafragma contraído los tres minutos que se dilata en el tiempo y en nuestra alma. Sin duda, uno de los mejores momentos de su trabajo. La travesía continúa con un desarrollo donde la electrónica constituye el elemento principal, en el que se incrustan samples de diálogos tomados de una compañía de danza y performances.  Los instrumentos van reincorporándose y fusionándose con esta escena, para devolvernos al camino inicial del post metal. Pero las sorpresas no han acabado en Sistere; solo estamos a medio tema. Hacia el tercio final, la aparición de trompetas y trombón nos volverá a dejar boquiabiertos, en una predespedida pausada y arrebatadora, de belleza desgarrada, que acaba por ser destruida completamente por el drone que concluye el tema y el disco.


Izah se muestran al mundo con un primer larga duración que rebosa ambición, riqueza y talento, y que seguramente no esté al alcance de demasiadas bandas. Tras él, es obvio que será un grupo a seguir tanto en directo como en su siguiente obra, en la que para mí deberán asumir dos retos principales. El primero, ser capaces de superar en calidad esta ópera prima. El segundo, ser capaces de encontrar una identidad algo más propia, que pueda definir su sonido como sello distintivo en su género, en el que podrían ser candidatos a subir a los puestos de privilegio en los próximos años. Pero no anticipemos tanto, que este Sistere todavía no ha visto la luz de las calles; su salida oficial está prevista para el día 12 de este mes. Como no podía ser menos un comando Melomaniacs ya ha hecho el preorder de esta joya, en 2xLP coloreado y espera ansioso su llegada para disfrutarlo a 33 revoluciones por minuto.
 


Puntuación: 7/10
Sello: Nordvis

3 comentarios:

  1. Gran crítica para un gran grupo. Si que es cierto que hay muchos pasajes atmosféricos que recuerdan bastante a los ISIS del Panopticon, y coincido contigo en el hecho que aunque se ven de forma clara las influencias de esta banda, apuntan maneras y obviamente el comando Melomaniacs le seguirá la pista muy de cerca.
    El cénit del disco para mi llega en el tercer tema, "Finite Horizon", esas partes mas atmosféricas (como me recuerdan a los ISIS del Panopticon por dios! es que a partir del minuto 6.24 es ISIS total), las guitarras de ritmos más pesados, la ralentización de los ritmos de batería y la voz de ultratumba es simplemente exquisita en este tema (destacar minuto 8.24 en adelante del tema, esa mezcla de la parte mas atmosférica con las melodías bocales es simplemente increíble).
    Muy grandes IZAH, con la única crítica posiblemente, como bien apuntas en tu análisis, de que necesitan apartarse un poco de las influencias que tienen ya que alguien ducho en este subgénero musical claramente va a identificar las reminiscencias que hacen a lo largo del plástico.

    Por cierto me encanta tu blog.

    Un abrazo!

    MetalLawyer

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    1. *vocales (que estoy en la tablet y esto escribe lo que quiere)

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  2. Muchas gracias, Metal Lawyer. Brutal comentario. Se agradece!

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